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Qué son los vértigos en la cama y cómo evitarlos

15/08/2023


Experimentar vértigos en la cama puede ser una experiencia desagradable para quienes los padecen. Estos episodios repentinos de mareos y la sensación de girar o de movimiento pueden generar una pérdida en la calidad del descanso.

 

Los síntomas de los vértigos en la cama pueden variar desde mareos leves hasta una sensación intensa de que la habitación está dando vueltas rápidamente, lo que puede llevar a problemas como ansiedad, estrés y dificultades para conciliar el sueño. 

En este artículo, exploramos los síntomas asociados con los vértigos en la cama, así como algunas medidas que se pueden tomar para evitarlos.

Quien más y quien menos ha sentido alguna vez en su vida un mareo al levantarse de la cama, sobre todo si lo haces rápidamente. Tranquilo, no hay de qué preocuparse, si se trata de algo esporádico.

Los vértigos al levantarse de la cama, también conocidos como Vértigo Postural Paroxístico Benigno (VPPB), son un tipo común de trastorno del equilibrio que se caracteriza por una sensación repentina de giro o movimiento al cambiar de posición en la cama, como levantarse de forma brusca. Esta sensación desorientadora puede durar desde unos segundos hasta varios minutos y no es raro que vaya acompañada de mareos, náuseas y una sensación de inestabilidad.

El VPPB se produce debido a la presencia de pequeños cristales de calcio, conocidos como otolitos, en el oído interno. Estos cristales normalmente se encuentran en una parte específica del oído interno, pero cuando se desplazan a otras áreas sensibles a la gravedad, pueden desencadenar una señal incorrecta al cerebro sobre la posición de la cabeza. Esto provoca una confusión en el sistema de equilibrio, lo que resulta en vértigo al levantarse de la cama.

Si bien el VPPB no suele ser peligroso, puede generar molestias significativas en la vida diaria. Las personas que experimentan estos vértigos con frecuencia pueden tener dificultades para llevar a cabo actividades cotidianas, como levantarse de la cama, moverse rápidamente o inclinar la cabeza hacia atrás.

Afortunadamente, existen tratamientos y ejercicios específicos que pueden ayudar a aliviar los síntomas del VPPB y minimizar su impacto. Es importante consultar a un médico o a un especialista en oído, nariz y garganta (otorrinolaringólogo) para recibir un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.

 

Síntomas del vértigo en la cama

Evidentemente, en función de la causa, y de la persona, los síntomas pueden variar, pero estos son los más frecuentes:

  • Sensación de movimiento de la persona o del entorno, estando en reposo.
  • Náuseas y vómitos.
  • Mareos.
  • Inestabilidad o pérdida de equilibrio.

Si te ocurre con frecuencia o sin causa aparente, acude de inmediato a un médico especialista para que te diagnostique debidamente.

 

¿Qué ejercicios puedo realizar para evitarlos?

En función de la causa que provoque los vértigos en la cama, y si te ocurren en ocasiones aisladas, podrás aliviarlos o prevenirlos a base de ejercicios.

En el caso del vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB) existen ejercicios que están diseñados para reposicionar los cristales de calcio en el oído interno y restablecer el equilibrio. Estos son los dos ejercicios comunes utilizados para tratar el VPPB:

NOTAS IMPORTANTES: 

  • Es posible que durante la realización de estos ejercicios los síntomas empeoren y te sientas más mareado, no te preocupes, es normal. Te aconsejamos que tengas a mano una palangana o cubo por si tienes ganas de vomitar.
  • Efectúa estos ejercicios un día en el que no tengas planes, y puedas descansar después de llevarlos a cabo. 
  • Busca un dormitorio tranquilo, donde puedas estar lo más concentrado posible, sin elementos visuales ni sonoros que te puedan molestar.  

Ejercicio de Brandt-Daroff

  • Siéntate en el borde de la cama con las piernas extendidas.
  • Gira la cabeza solo 45 grados hacia el lado afectado, es decir, hacia donde experimentas el vértigo. Presta atención a los grados a los que giras la cabeza, puesto que si te pasas puede que no surta el mismo efecto. 
  • Lentamente, recuéstate en la cama manteniendo la cabeza girada hacia el lado afectado y levantando los pies al mismo tiempo. Coloca las manos juntas entre tus muslos. 
  • Permanece en esta posición durante 30 segundos sin mover la cabeza.
  • Vuelve a la posición inicial y mira al frente. ¿Notas mejoría? Puede que al principio no, pero espera 30 segundos. 
  • Luego, gira la cabeza hacia el lado opuesto, es decir, en dirección opuesta al vértigo y repite el ejercicio.
  • Repite 5 veces el ejercicio a cada lado.

 

4 consejos extra para aliviar los vértigos en la cama

Mantener una vida activa, practicar deporte, hacer estiramientos, evitar posturas incorrectas durante tiempos prolongados, son buenos hábitos tanto para tu salud general como para mantener la musculatura. Si tus vértigos son por debilidad en la zona cervical, aquí tienes otras técnicas que te pueden aliviar:

  1. Movimientos lentos al levantarte: evita levantarte de forma brusca o rápida de la cama. En lugar de ello, siéntate en la cama durante unos segundos antes de levantarte lentamente. Esto puede ayudar a que tu oído interno se ajuste gradualmente a los cambios de posición y disminuya la intensidad de los vértigos.
  2. Evita movimientos de cabeza bruscos: especialmente al inclinarte hacia atrás o girar bruscamente. Estos movimientos pueden desencadenar o agravar los vértigos. En su lugar, realiza los movimientos de forma suave y gradual.
  3. Mantén una buena higiene del sueño: asegúrate de tener un ambiente de sueño adecuado, una habitación luminosa durante el día y oscura por la noche, una temperatura confortable y una almohada adecuada. Dormir lo suficiente y mantener una rutina regular de sueño también puede contribuir a reducir los vértigos.
  4. Mantén una postura adecuada: al estar en la cama, asegúrate de mantener una postura adecuada. Evita girar la cabeza hacia posiciones extremas o mantenerla en una posición incómoda durante períodos prolongados.

 

Para ello, es muy importante que dispongas del mejor colchón: ese que mejor se adapte a tu cuerpo, tu peso y garantice una buena postura al dormir.